viernes, 8 de febrero de 2013

Formación y Empleo (Cursos café para todos)

Las devastadoras cifras del paro que vienen repitiéndose mes tras mes y trimestre tras trimestre deberían llevar a los responsables de las políticas de empleo y formación a reconsiderar la utilidad de las actuaciones que actualmente se llevan a cabo. En este sentido,  y tras las múltiples afirmaciones por parte de expertos, políticos y gente en general acerca de la importancia de la formación como elemento clave de la empleabilidad me gustaría hacer un repaso al sistema actual y sugerir ciertos cambios siempre con espíritu crítico para mejorar la situación que tanta falta hace.
 
CONDICIONAMIENOS A LA HORA DE REALIZAR UN CURSO PARA DESEMPLEADOS:
 
1. Condicionamiento material (¿De qué es el curso?): Los cursos ofertados no responden a la demanda de los individuos que los van a realizar. Es decir, que contra todo lógica de mercado, son los oferentes los que proponen los cursos según lo que a juicio de ellos interesa o no.
 
2. Condicionamiento de los oferentes (Sólo algunos pueden ofrecer cursos): Entre los oferentes de cursos nos encontramos principalmente con los servicios de empleo a través de sus propios medios, los sindicatos, la patronal y otros. Todos ellos reciben dinero público por ofertar estos cursos. En general, viene siendo una cantidad por alumno por lo que no deja de ser otra fuente de financiación para estas entidades. Lógicamente, de cada alumno se llevan un margen.


 

3. Condicionamiento temporal (Los cursos se ofrecen para determinadas fechas): Generalmente, los cursos empiezan en unas fechas y terminan en otras. Si no estas en paro en las fechas adecuadas tienes que esperar hasta que uno nuevo comience. Está claro que no se va a empezar un curso para cada persona, pero con cerca de 5 millones desempleados (Datos INEM - todo aquel haciendo un curso no forma parte de la cifra de parados), está claro que hay suficiente gente que coincide como para poder formar grupos de suficiente entidad para la operatividad de los mismos. 

4. No hay base central de consulta de cursos. Siempre tienes que acabar mirando uno por uno cada una de las páginas de los formadores.

DESVENTAJAS DEL SISTEMA ACTUAL:

1. El curso  no cuadra conmigo (Cursos  demasiado generales): Hoy día que cada vez se pone más énfasis en los itinerarios personalizados. Cada persona es un mundo y cada uno tiene unas necesidades de formación específicas y en vez de tratar de impulsar esto,  seguimos con el método de cursos generales que se entiende que muchos pueden demandar.  En este sentido podríamos poner de ejemplo; al comercial con estudios, máster y con muchos años de experiencia que ha cumplido con creces los objetivos pero que no sabe idiomas. Cómo en España se vende muchísimo menos y son las exportaciones lo que tira del mercado, ésta persona para ganar empleabilidad necesita clases de idiomas y no otro tipo de clases. Si que es cierto que ahora hay cursos más especializados pero en muchos casos se mezcla gente con niveles muy distintos y esto hace que la formación no sea todo lo eficiente y provechosa que debiera.
 
2. Los cursos están ofrecidos por ciertos formadores: En general, esto suele traer problemas de competitividad. Si hubiese más formadores que pudieran ofertar, las fuerzas de la competencia haría que acabasen quedando los mejores y el diploma de haber hecho cursos con esos formadores, tendría un mayor valor.
 
3. Si la mayor parte de los cursos comienzan en determinadas fechas, si alguién se queda en paro fuera de esas fechas, está desaprovechando tiempo.

CAMBIOS QUE SE PUEDEN REALIZAR EN EL CORTO PLAZO:

1. La formación ha de basarse en las necesidades de los empleadores, hay que formar a las personas en aquello que los empleadores demandan y no en cursos generales como se sigue haciendo en la mayor parte de los casos. La oferta de formación debe basarse en la demanda última que no es otra que lo que las empresas necesitan.

2. Hay que descubrir los itinerarios de formación para que los parados tengan mayores posibilidades de acceder a un trabajo. Actualmente la información sobre la capacidad y curriculum de los desempleados en los servicios de empleo no es ni mucho menos completa y muchas veces ni se le presta atención.

3. Los cursos son ofrecidos por distintos agentes, en vez de existir una única base de datos y registro común, en dónde se pueda encontrar y registrarse fácilmente para los cursos. Debería haber una entidad que centralizase esto, de manera que además, se pudiera llevar un mejor control y se pudieran obtener datos sobre la idoneidad o no de los cursos que se ofrecen.

4. Las fechas de los cursos, en bastantes casos corresponden con fechas similares al inicio de clases; octubre, enero... cuando el desempleo afecta durante todo el año. Debería establecerse alguna formación de carácter continuo aunque sea por internet online.
 
SISTEMA PROPUESTO:
 
Como actualmente, existen partidas presupuestarias específicas anuales cuyo fin son los cursos para desempleados, se propone algo similar al cheque escolar:
 
1. Deberían tratarse como ayudas a la educación pero exentas de impuestos y en este caso se excluirá de su percepción tan sólo a aquellos que tengan un patrimonio suficiente como para poder pagarse la formación ellos mismos.

2. Las partida será la cuantía máxima global de la ayuda.

3. Las ayudas se sacarán de forma bimestral, de manera que un parado no tenga porque estar como ahora esperando a que saquen nuevos cursos.

4. Será aquella persona interesada en realizar un curso de formación quién decida con qué entidad realizará el curso.

5. Las entidades habrán de estar todas homologadas o por los servicios de empleos, por el ministerio de educación o  tener prestigio reconocido.

6. Cada beca tendrá  un importe máximo, de manera que si alguién quiere utilizar ese dinero para acceder a formación más cara, como podría ser un máster, tendrá al menos una parte del coste monetario del máster cubierto. Se podrá financiar desplazamiento también.

7. Toda la tramitación podrá hacerse online, por lo que será el  propio servicio el que cruce los datos con hacienda para saber de la idoneidad del candidato para acceder a la beca y podrá consultar en todo momento el estado de ésta.

8. La aprobación o denegación de la beca deberá resolverse en menos de 5 días desde la fecha límite de entrega, al fin y al cabo basta con comprobar que la persona en concreto es demandante de empleo y no tiene un patrimonio mayor a la cantidad que se fije (por supuesto con las exclusiones de vivienda habitual... que el  propio impuesto de patrimonio fija). Aquellos denegados tendrán 5 días para apelar. Se resolverá en los 5 días posteriores la apelación.

9. El alumno una vez inscrito deberá acudir al centro de formación, si fuera necesario,  y cumplimentar los trabajos que le sean asignados. En caso de no hacerlo sin que intermedie culpa ajena o porque haya encontrado empleo, se le penalizará.

10. Los pagos de la ayuda serán directamente efectuados por el Ministerio al centro formador una vez haya comenzado el curso. El centro deberá justificar que el curso se está llevando a cabo, que el alumno está matriculado y deberá facilitar la información de asistencia del alumno.

Esquemáticamente:


 
 
VENTAJAS DEL NUEVO SISTEMA:
 
1. Se introduce flexibilidad a la hora de poder elegir cursos de lo que más se necesite y en el momento en el que se necesite. Si alguien se queda en paro en noviembre no tiene sentido que tenga que esperar unos cuántos meses a que haya nuevas posibilidades.
 
2. Se introduce competitividad entre los formadores, que tratarán de ofrecer mejores cursos y más adaptados a la demanda de los individuos.
 
3. Se incentiva a la realización de cursos por parte del desempleado. Es él quién decide a quién elige y no queda restringido por las decisiones de otros. 
 
4. Las personas tendrán la percepción del gasto que suponen los cursos y del coste que esto supone para el Estado.

5. Se evitan concesiones de cursos que pudieran ser sospechosas.

SUGERENCIA PLATAFORMA EDUCATIVA ONLINE :
 
Creación de una plataforma educativa online al que tuvieran acceso las personas desempleadas para realizar cursos online con feedback de un tutor y la realización de pruebas periódicas como la realización de trabajos para la obtención del título. Lo positivo de estas plataformas es:
  • La tecnología ya existe, no es necesario demasiado gasto en desarrollo; hay plataformas creadas que ya funcionan e incluso ofreciendo cursos gratis como Miriada X.
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  • Coste de la formación mucho más bajo.
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  • Mayor alcance, se puede hacer cursos para mucha más gente.
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  • Mayor oferta de cursos para el desempleado.
  • Los desempleados de pequeños núcleos urbanos tendrían acceso a oportunidades de formación que tan sólo se pueden ofrecer en núcleos más poblados, dónde se encuentran las instituciones de formación más potentes.

1 comentario:

  1. A lo que cabe añadir, que la mayor parte de la formación está dirigida a ocupados/as. Así que nos encontramos en una situación en la que un hito tan relevante para la empleabilidad de los desempleados/as como es la formación está fuera de alcance, bien sea porque no se ajusta a las necesidades, o bien por la dificultad de su acceso ya que se dirige a personas ocupadas.

    Y luego nos encontramos con noticias como que Valencia solo gastó para formación de parados el 16 % del dinero a dos meses de cerrar 2012 (fuente: http://www.levante-emv.com/comunitat-valenciana/2013/01/30/consell-gasto-formacion-parados-16--dinero-meses-cerrar-2012/970459.html ).

    Y no me malinterpreten, no digo que no se deba formar a los empleados/as, y más en determinados sectores, pero dada la situación actual debería de primar la formación de los desempleados para ganar en empleabilidad.

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